Dentro de la catequesis vamos a leer y meditar sobre estos capítulos del Evangelio:
San Juan, capítulos 13 al 17, enmarcados dentro de "LIBRO DE LA GLORIA (13-20)"
Jn13, 1-20 El lavatorio de los pies, en aquellos tiempos era costumbre entre los judíos que una persona de la casa lavara los pies a los recién llegados, pero este no era el caso puesto que ya estaban en ella. También era costumbre, siguiendo lo dicho en los salmos, que la persona que presidía la mesa lavase las manos a todos antes de la cena de Pascua, por eso no les extrañó a los Apóstoles que Jesús se levantara con el agua y la toalla. Pero Jesús con este acto no quiere quedarse en lo meramente físico del lavado de pies, ni incluso del lavado del alma; les dice que los que están limpios, ellos, no necesitan hacerlo de nuevo puesto que ya creen en Jesús. En esta ocasión nos trata de explicar que debemos servir al resto de personas, aunque nos suponga ciertas cosas que quizás no nos satisfagan en exceso incluyendo servir a quien nos ha traicionado o no nos cae bien como el hace al lavarle los pies también a Judas. Termina diciéndonos "El que recibe a quien yo envíe me recibe a mí; y el que me recibe a mí recibe al que me ha enviado" , la misericordia es el camino hacia el Señor.
Jn13, 21-30 Predicción de la traición de Judas, nuevamente debemos tener en cuenta algunas cuestiones previas: en aquella época entregar un trozo de pan a algún comensal era un acto de cariño y esto Jesús lo hacía habitualmente por eso no les extrañó que se lo diese a Judas; el anfitrión de la cena de Pascua era el más mayor de los asistentes o el más importante en algún sentido, en este caso el Señor era el anfitrión porque era el Maestro, y solía sentar a su lado a su invitado más especial, en uno de ellos estaba Juan, que, aunque no lo mencione, se dice que era uno de sus más queridos discípulos y al otro a Judas. La misericordia de Jesús es infinita, conociendo absolutamente todo lo que va a pasar, quien le va a delatar, sienta a su lado a la persona que le va a entregar a sus verdugos, le da un "trozo de pan untado", ........ El perdón, recibido y entregado y el amor al prójimo, como parte de nuestras vidas.
Jn13, 31-35 La hora de la glorificación y el mandamiento nuevo, los versículos 31 y 32 son una auténtica clase de Teología, para Jesús su muerte es su gloria por ir junto al Padre y la nuestra propia porque es nuestro salvador y cuando dejemos este mundo nos reuniremos con él y también lo es para Dios, su Padre, porque se ha glorificado al traerle a este mundo.
Hasta la muerte de Jesús, ni siquiera ellos están salvados, por eso les dice que no le pueden seguir.
Nos deja también un mandamiento nuevo. La Biblia decía que había que amar a Dios pero ahora nos dice que nos tenemos que amar los unos a los otros como él nos ha amado y nos sigue diciendo en el versículo 35 que los cristianos deberíamos ser reconocidos por eso.
Jn13, 36-38 Predicción de las negaciones de Pedro, les vuelve a recordar que aún no pueden seguirle, no terminan de entenderlo porque no podían ni imaginar lo que iba a suceder, Jesús ha venido a este mundo para darnos nuestra salvación mediante su muerte pero advierte a Pedro que cuando le pregunten por él le negará. Nosotros tenemos que honrar la palabra de Dios y no dejarnos llevar por las corrientes de pensamiento predominantes actualmente que lo niegan, no hacerlo, es hacer lo mismo que Pedro.
Jn14, Discurso de despedida, Jesús sigue con su discurso de despedida pero no terminan de salir de su asombro porque no entienden nada, pero tampoco quiere que se agobien. Los judíos no creían que al morir se va al cielo, todo esto es novedoso para ellos, y él les explica que van a estar junto al Padre porque les tiene preparada una morada (un espacio). Aún no los va a llevar porque está esperando la conversión de más personas y son ellos los que tienen que predicar.
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"Tomás le
dice: «Señor, no sabemos adónde vas, ¿Cómo podemos saber el camino?" aquí les responde con una cuestión muy importante: "yo soy el camino, la verdad y la vida", la única forma de ir al padre es mediante Jesús y solo Jesús, conociéndole a él podemos conocer la verdad, Jesús es la vida eterna.
En el versículo 7 dice que conociéndole a él ya están conociendo al Padre en clara referencia a la Santísima Trinidad. No dejan de salir de su asombro con todas las cosas que les está contando en tan poco tiempo. Las obras que hace Jesús son de misericordia y esas mismas obras son las que les dice que pueden pedir al Padre, nunca para su propia gloria y mediante éstas el Padre será glorificado en el hijo.
En el versículo 15 les indica, nos indica, que sigamos los Mandamientos si le amamos, el no obedecerle sería una muestra de falta de amor y respeto.
Anuncia la llegada de un parácllito (en griego el que está al lado), el Espíritu Santo. "El mundo no puede recibirlo, porque no lo ve ni lo conoce; vosotros, en cambio, lo conocéis, porque mora con vosotros y está en vosotros", les vuelve a anunciar a la Santísima Trinidad, el Padre, el Hijo y el Espíritu Santo como una única persona, conociendo a Jesús, conoceremos a los tres.
V18. |
Jn15, Ampliación del discurso de despedida, la vid y los sarmientos,
Jn15, La venida del Espíritu Santo,
Jn16, La venida del Espíritu Santo,
Jn16, Despedida,
Jn17, Oración sacerdotal,
Rom8, Libres en el Espíritu, No hay condena para los que están en Cristo,
Rom8, Libres en el Espíritu, El don de la adopción filial,
Rom8, Libres en el Espíritu, El gemido de la creación y de los creyentes,
Rom8, Libres en el Espíritu, La certeza de la plenitud futura,,




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